- La compañía Teatre de l'Aurora y el colectivo Cultura y Conflicto llegan el 28 de noviembre al Auditorio de la capital leonesa con la obra 'Hay alguien en el bosque'
El programa de adultos de la programación de artes escénicas del Auditorio Ciudad de León continúa el 28 de noviembre con una propuesta de teatro documental. Se trata de la obra 'Hay alguien en el bosque', de la compañía Teatre de l'Aurora y el colectivo Cultura y Conflicto. A las 20:30 horas se subirá el telón del Auditorio para dar paso a una obra que ha sido finalista a la mejor dramaturgia en los prestigiosos Premios Max.
'Hay alguien en el bosque' es una obra de teatro documental en la que hay siete intérpretes en escena y música en directo. Se trata de una creación de Anna María Ricart Codina, y cuenta con la dirección de Joan Arqué Solá. Esta obra se estrenó en el festival Temporada Alta y en el Teatre Nacional de Catalunya en otoño de 2020, coincidiendo con el 25 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz de Dayton que pusieron fin 'oficial' a la guerra de Bosnia. Los intérpretes son María Molins, Montse Esteve, Óscar Muñoz, Magda Puig, Judit Farrés, Pep Pascual y Erol Ileri.
El precio de las entradas es de 10 euros, incluido en el abono de adultos, y se pueden adquirir tanto en la app como en el canal de venta online del Auditorio Ciudad de León https://auditorio.aytoleon.es. La venta de entradas también está disponible en taquilla dos horas antes del inicio de la función.
Sinopsis
Siete intérpretes en escena y la música en directo nos harán viajar entre la Bosnia de los 90 y la Barcelona olímpica, entre los testigos reales y su representación, entre el relato de las protagonistas y los recuerdos de los propios actores y actrices, entre la realidad y la ficción.
Tres décadas después de las atrocidades cometidas en el corazón de Europa, la mayoría de las supervivientes lo viven en silencio, ignoradas por las instituciones, invisibilizadas por la sociedad e incluso rechazadas por sus propias familias. Esta obra da voz a la memoria y a la determinación de estas mujeres y de los hijos e hijas nacidos de las violaciones, de luchar contra el olvido ahora que los focos y las cámaras ya hace tiempo que se marcharon de Bosnia.
Para Nevenka, Milica, Meliha, Alen, Ajna y Lejla la guerra no ha terminado todavía. El dolor que sienten es tan grande que, para ellas, todavía hay alguien en el bosque.